En la semana 13  ya estás en el segundo trimestre de embarazo y has recorrido un tercio del camino.

Entre los primeros síntomas que notarás que irán remitiendo en la semana 13 es que las náuseas y esa sensación de quedarte dormida en todas partes tienden a desaparecer.

Energía y vitalidad en la semana 13 de embarazo

De hecho, es probable que te sientas llena de energía y de vitalidad. también verás cómo tu cuerpo se va ensanchando porque tu bebé que no para de crecer, necesita cada vez más espacio para moverse.

Ropa premamá

Ya no puedes retrasar más la compra de ropa premamá, los pantalones con goma que se pueden ir adaptando al crecimiento de nuestra barriga son un básico imprescindible hasta el final del embarazo.

Te recordamos que en la semana 13, es bueno que digas en el trabajo que estás embarazada, si no lo has dicho antes; y empieces a pensar en todos los cuidados que va a necesitar tu bebé, que hagas una lista de las cosas que vas a necesitar, que impliques al padre en todo el proceso y que disfrutes de todos los cambios que vas a vivir.

Semana 13

Cambios que experimenta tu bebé

Peso y tamaño

Como a partir de ahora tu bebé crece más deprisa, debes saber que en la semana 13 tiene ya el tamaño de un limón; mide unos 8 centímetros y pesa unos 20 o 25 gramos.

Forma y desarrollo del bebé

En su interior se han producido ya una serie de cambios importantes, es capaz de moverse y estirarse, lo que le permite flotar en la placenta.

La cabeza sigue siendo desproporcionada con respecto al cuerpo y en su cara se dibujan cada vez más rasgos, y los ojos y las orejas se dirigen hacia su posición.

A nivel interno, también se producen cambios en su cerebro, donde se empiezan a vislumbrar las dos partes en las que se divide. A partir de aquí, su sistema nervioso también es capaz de mandar órdenes a los miembros superiores e inferiores para que se muevan.

Cambios que experimenta tu cuerpo

En la semana 13, como tu bebé va creciendo, va desplazando ciertos órganos, lo que se traduce en pequeñas molestias al respirar o al comer.

Por eso, debes ponerte ropa que no te apriete. El aumento de tu peso es ya evidente, pero no te creas que tienes que comer por dos. Es un falso mito.

Debes seguir las recomendaciones de tu equipo de especialistas para no coger más kilos de los necesarios.

Recuerda que en estos meses el aporte calórico diario no debe superar las 2.500 calorías, aunque sabes que esas necesidades dependerán de tu IMC previo al embarazo. Sigue las pautas dietéticas que te van poniendo en las revisiones.

¿Qué puedes sentir en la semana 13 de embarazo?

  • Retención de líquidos.
  • Mamas abultadas y pezones más oscuros.
  • Molestias en la pelvis.
  • Dolor en la ingle y en la parte inferior de la barriga.
  • Tus venas se hacen más visibles.
  • Tienes más energía.

Sistema inmunitario débil

Alrededor de la semana 13 tu sistema inmunitario puede estar un poco más débil, por lo que tienes que tener cuidado de no acatarrarte.

También puedes tener una infección de orina. Si sientes escozor al orinar, orinas con frecuencia y tienes hematuria, es decir sangre en la orina, acude a tu médico para que valore una posible infección de orina.

Aumento del deseo sexual

Durante este periodo de tu embarazo puedes sentir un aumento del deseo sexual. Si no tienes ninguna contraindicación, puedes mantener relaciones sexuales sin problema; tu bebe está protegido por el tapón cervical.

¿Qué pruebas debo hacerme en la semana 13?

Además de pesarte para ver cómo va la ganancia de peso, te pueden hacer una ecografía si no te la han hecho la semana 12.

En esta se verá prácticamente lo mismo que hace una semana y, además, puedes ver el sexo de tu bebé. No obstante, la mayoría de los especialistas prefieren esperar a la semana 18 o 20 para que no haya confusiones con el sexo del bebé.

Si es invierno, sobre todo los meses de octubre y noviembre, a partir de la semana 13 también puedes vacunarte frente a la gripe, porque recuerda que las embarazadas son un grupo poblacional donde está indicada y recomendada la vacunación.