Es normal que al ser madres primerizas la incertidumbre en ocasiones se convierta en una obsesión y donde la calma ha desaparecido de nuestras vidas.
Lo primero que tenéis que saber es que desde que el mundo es mundo ya ha habido muchas madres primerizas que han pasado por la misma situación por la que estás pasando tú y debes tener en cuenta una serie de consejos para disfrutar de tu maternidad.
Consejos para madres primerizas
Identificad sus necesidades
Llorar es la forma que vuestro hijo se comunica con el exterior. Llorará cuando tenga hambre, quiera dormir, tenga gases o se sienta incomodo. Aprende a descifrar su llanto, en unos días sabrás que es lo que le pasa cuando llora y podréis atenderle en lo que necesite.
Que se adapte poco a poco a vuestro entorno
Una vez que llegáis a casa, todos quieren ir a conocer al pequeño. Tenéis que ir poco a poco y dosificar las visitas. Ten en cuenta que estar con muchas personas al mismo tiempo en una misma habitación hablando puede aturdirle y confundirle.
Dormir lo suficiente
No es fácil, pero dormir tiene que ser una de vuestras prioridades. Es lo más difícil cuando tenéis que despertaros cada dos o tres horas para dar de mamar a vuestro bebé, pero aprovechad cuando el está durmiendo para echar una cabezadita. Si no estáis descansadas, no podréis afrontar bien las situaciones que se vayan planteando.
Intentad tener tiempo para vosotras
Aunque sea unos minutos, debes hacer alguna actividad que hacías antes de tener a tu hijo en brazos. Sacad tiempo para leer, ver una película (aunque sea por partes) o llamad a vuestras amigas.
Ante las situaciones nuevas, tenéis que mantener la calma. No dejéis que los nervios se apoderen de vosotras, no son un buen aliado y no os llevarán a resolver los problemas que tengas.
Madres primerizas, dejaos ayudar
No es un signo de debilidad de las madres primerizas, es bueno aprender de las madres que ya tienen experiencia. Podéis quedar con vuestras amigas o con otras madres. Recordad que ellas están o han estado en tu misma situación.
No obsesionarse con la limpieza
Aunque seamos madres primerizas, no podemos pasarnos el día esterilizando todo lo que toque nuestro hijo. Hay que seguir las recomendaciones que nos ha dado tu médico y la matrona.
No abrigarle demasiado
Otro error frecuente de las madres primerizas, es que para saber si tiene frío no tenéis más que tocarle sus pies y si tienen la temperatura correcta no hay necesidad de ponerle una manta en la cuna.
Disfrutad de todos los momentos que pases con él
Recordad como madre primerizas, que cuando estéis dando el pecho serán los de mayor conexión. Hazlo de forma tranquila y sin que nadie os moleste.