Antes de que llegue el momento más esperado para los padres, el nacimiento de su bebé, debéis conocer los distintos tipos de parto.

Puedes y debes hablarlo antes con tu médico que te comentará las opciones que hay y así podéis tomar la decisión en función de lo que queráis.

Los centros especializados en la atención al parto podrán ofrecernos distintas posibilidades de alumbramiento, así como un parto no intervenido o ‘humanizado’. Y es que existen distintos tipos de parto, según el grado de intervención.

Tipos de parto

Parto natural

Entre los diferentes tipos de parto se encuentra el parto natural, la filosofía de este parto se basa en el no intervencionismo médico y en recuperar la esencia del acto natural del alumbramiento.

En estos tipos de parto se deja que la naturaleza siga su curso, no se utiliza tecnología médica, fármacos o sedantes.

Es la madre la que lleva adelante el trabajo del parto de manera libre, se le permite deambular y adoptar la postura que desee para el expulsivo.

Sin embargo, son pocos los centros en los que pueda hacerse este tipo de parto con las garantías higiénicas y sanitarias necesarias. Y en caso de complicaciones las posibilidades de solucionarlas con éxito son bajas.

Qué tipos de parto existen actualmente

Parto de baja intervención o ‘humanizado’

Comparte la filosofía del parto natural pero con las garantías higiénicas y sanitarias necesarias para atender de manera adecuada a la madre y al bebé durante todo el proceso del parto.

De esta manera, el parto humanizado se asiste sin usar procedimientos terapéuticos que alteren su fisiología, haciéndolo más íntimo y natural, pero sin renunciar a los avances de la ciencia.

Durante este tipo de parto es fundamental la vigilancia del estado materno-fetal, la asistencia psicológica a la futura madre y el acompañamiento de la pareja o familia.

Asimismo, se realizan trabajos previos de preparación física durante el embarazo para promover la participación activa de la madre y facilitar el parto.

No se utilizan fármacos o sedante y para el expulsivo se coloca semisentada. En el caso de que el parto se aleje de la normalidad se cuenta con todas las herramientas tecnológicas y con personal sanitario experimentado para resolverlo de manera adecuada.

Parto medicalizado

Estos tipos de parto se basan en el control y monitorización constante de la madre y del feto, y la regularización de las contracciones en los casos necesarios.

Se utilizan fármacos o sedantes, y se suele romper aguas de manera precoz para acelerar el parto. Todo el proceso es seguro tanto para la madre como para el bebé, aunque implica un excesivo intervencionismo médico.