Cuidados y prevención COVID-19

La prevención es uno de los mejores remedios contra el Covid. Por eso desde que la pandemia comenzó a extenderse el Ministerio de Sanidad ha publicado diferentes medidas destinadas a proteger a las personas y a su entorno. El hecho de que haya personas asintomáticas con capacidad para contagiar ha sido un factor que ha obligado a extremar las precauciones.

La mayor parte de la población es consciente y ha escuchado estas medidas que se basan en un cambio de hábitos. Una de las más habituales es el lavado de manos con agua y jabón o gel desinfectante. También se recomienda mantener una distancia superior al metro y medio en los exteriores y con personas cercanas que estornudan con frecuencia o que presenten síntomas propios del virus.

Si todo este distanciamiento físico no es posible se recomienda utilizar mascarilla, sobre todo en espacios cerrados. También es importante evitar llevarse las manos a la nariz o a la boca después de haber estado en lugares que no hayan sido desinfectados o por los que hayan pasado muchas personas. De hecho, todos los establecimientos abiertos al público, sea del tipo que sean tienen que desinfectar su espacio antes de la llegada de clientes y después de su paso.

Si se da el caso de que la persona presenta algún tipo de síntoma, no está segura de haber estado en contacto con alguien infectado y tiene que salir de su domicilio, debe usar mascarilla en todo momento y cubrirse la nariz y a boca cada vez que tenga necesidad de estornudar o toser.

En estos casos siempre es conveniente permanecer en el domicilio y solicitar atención médica. La llamada al centro de salud es el procedimiento más adecuado, en esa conversación se puede hablar con un facultativo y explicarle la situación con todo detalle. El sanitario indicará cuáles son los pasos a seguir.

Todos los gobiernos autonómicos establecen una serie de medidas de prevención que son más o menos flexibles en función de la incidencia que tenga el virus en ese territorio. A nivel general se recomienda combinar el uso de la mascarilla con el distanciamiento físico y la higiene de manos. También se recomienda evitar los espacios cerrados y los lugares en los que haya grandes aglomeraciones.

Finalmente se pueden aplicar medidas de prevención a modo personal. Esto consiste en auto vigilarse todos los días comprobando que no hay subidas bruscas de temperatura corporal, que no aparecen síntomas de cansancio, que los sentidos, sobre todo el olfato, funcionan de forma adecuada, que no hay dificultades para respirar y que en el entorno no hay contactos que presenten síntomas de Covid.