El capilaroscopio

La capilaroscopia llega a pediatría para mejorar el diagnóstico de enfermedades reumatológicas.

Las enfermedades que vemos los reumatólogos pediátricos ya de por sí son bastante raras. Dentro de estas rarezas, la enfermedad que más solemos ver nosotros es la artritis idiopática juvenil. ¿Qué pasa? Que el resto de enfermedades que vemos nosotros, que son aún más raras, son difíciles de diagnosticar.

Función del capilaroscopio

El capilaroscopio nos ayuda a poder diagnosticar este tipo de enfermedades que podemos sospechar que pueden tener los niños. Hasta ahora, en los niños, que ya de por sí son bastante difíciles de diagnosticar, lo que hacíamos es basarnos en la clínica y en las analíticas. Realmente esta técnica es una técnica que hasta ahora solían hacer los de adultos, y no siempre, porque de los niños hay muy poca literatura descrita sobre esto.

El capilaroscopio es una técnica que lo que hace es visibilizar los vasitos sanguíneos que hay justo aquí al pie de la uña. ¿Por qué aquí? La verdad es que es una zona bastante accesible, y que, además, los capilares que tenemos justamente en la zona periungueal, digamos que van perpendiculares a la piel, que no pasa en otras zonas del cuerpo. Es una prueba que la verdad es que es muy accesible, que no radia y que, además, no hace daño.

Fenómeno de Raynaud primario y secundario

El capilaroscopio es la mejor manera para poder distinguir entre un fenómeno de Raynaud primario y secundario. ¿Esto en qué difiere? El fenómeno de Raynaud es que los dedos, en contexto del frío, cambian de color y se ponen azules, rojos o blancos. El fenómeno de Raynaud puede ser el primer síntoma que tienen esas enfermedades raras. ¿A qué enfermedades raras me refiero? Principalmente sería la esclerosis sistémica, pero además nos sirve para otras enfermedades como son el Lupus, como es la dermatomiositis o la enfermedad mixta de tejido conectivo. Son enfermedades extremadamente raras.

La más frecuente dentro de esto sería la del Lupus, y más o menos afecta a 0,9 niños de cada 100.000. Son enfermedades que son muy, muy raras que suelen empezar además en torno a los 10 años y que suelen empezar más en niñas que en niños. Para hacer la capilaroscopia, realmente usamos 4 dedos, usamos 8 en total, no usamos el pulgar. Es una prueba bastante accesible porque lo que hacemos es colocar el aparato justo al pie de la uña, y como esto es realmente un microscopio óptico, lo que hace es que la imagen, la veo yo a través del ordenador, la veo en la pantalla. Lo que voy a haciendo es ir midiendo, viendo la disposición, viendo la densidad que tienen los capilares en esta zona de los dedos. Donde mejor se ven es en el cuarto y en el quinto, que es donde mejor se ve la imagen. Y lo hacemos especialmente desde el índice hasta el meñique.