Para mantener una alimentación saludable, es necesario llevar un orden en horarios y una variedad de alimentos, aprender a reconocer las sensaciones fisiológicas que acompañan al acto de comer, disfrutar con control de la alimentación en situaciones sociales y evitar comer por otros motivos emocionales.

 ¿Tener hambre o deseo compulsivo de comer?

Lo primero que tenemos que aprender es diferenciar tener hambre del deseo compulsivo de comer. El hambre se experimenta como una sensación de vacío en el estómago, con contracciones estomacales acompañadas de sonidos y una sensación de opresión en la boca del estómago.

La compulsión con la comida es un fuerte impulso a comer un alimento o comida en concreto, que se acompaña de tensión y/o ansia que se puede localizar en la garganta, boca o en el cuerpo en general.

En algunas ocasiones es fácil confundir las sensaciones del hambre con la ansiedad, pues en ambas el vacío estomacal tiene un papel protagonista.

¿Hambre real o psicológica?

Sin embargo, la clave es pararse a pensar a qué atribuimos esas sensaciones, ¿es hambre real o psicológica?

Para saber la respuesta lo mejor es hacerse  las siguientes preguntas:

¿Comerías cualquier cosa, que normalmente tengo incluida en la dieta o quiero un alimento en especial? De manera que diferencias entre hambre y ganas de comer.

¿Has respetado las tomas del día o te has saltado alguna? A lo mejor al cuerpo le faltan alimentos. Si es que sí, sustituye por un alimento saludable (fruta, yogurt, etc).

Te contamos algunos consejos para evitar caer en la sensación de hambre psicológica:

  • Piensa que no es una emergencia, que puedes controlarlo, en la sociedad en la que vivimos el acceso a la comida es inmediato.
  • Espera 10 minutos, posiblemente se te olvide.
  • Piensa que en poco tiempo comerás porque como sabes, no deberían pasar grandes periodos de ayunos.
  • Si la sensación persiste, desvía la atención de la comida, concéntrate en otras actividades que impliquen de tu atención activa (manualidades, tomar una ducha, llamar por teléfono, dar un paseo, etc.).

  • Haz ejercicios de respiración.
  • Si el deseo compulsivo persiste come cosas saludables.