Muchas mujeres a partir de los 50 buscan alguna solución para reducir papada. Y es que el desarrollo de la papada suele verse influido por los cambios hormonales, pero no son los únicos responsables de su aparición. Por su naturaleza, la zona de la papada tiene poco colágeno y elastina, dos proteínas fundamentales para que la zona se mantenga tersa.

Además, el hecho de que el cuello esté en constante movimiento hace que la piel caiga con más facilidad.

Formas de reducir papada

Estilo de vida saludable

En primer lugar, si se quiere reducir papada es importante seguir un estilo de vida saludable, limitando el consumo de alcohol, azúcar y sal, pues provocan retención de líquidos, lo que hace que aumente el tejido graso.

Orientador tratamientos de estética

Ejercicios para tonificar el cuello

Asimismo, puedes hacer distintos ejercicios de fortalecimiento y tonificación de los músculos de la zona. Eso sí, para conseguir los mejores resultados es fundamental la constancia y la paciencia.

Un ejercicio muy sencillo que puedes realizar es pronunciar las vocales abriendo la boca de forma exagerada (mejor hacerlo frente a un espejo), de esta manera notarás cómo toda la zona de la papada se tensa. Mantén la boca abierta en cada una de las vocales unos 10 segundos. Debes repetir este ejercicio por lo menos dos veces al día.

Otro ejercicio recomendado es sentarse con la espalda recta dejando caer los brazos a los lados, bien extendidos. A continuación, estira el cuello hacia delante tanto como nos sea posible y después lo gíralo hacia uno de los lados, manteniendo esa postura durante unos segundos. Vuelve a la postura inicial y haz el movimiento hacia el lado contrario. Repite el ejercicio 10 veces, al menos dos veces al día.

En algunos casos, y por mucha constancia que se tenga, los ejercicios no dan los resultados esperados y se puede recurrir a tratamientos específicos que se adapten a las necesidades y tipo de papada de cada persona. Algunos de los tratamientos para mejorar la papada son la cavitación y la mesoterapia.

Liposucción de papada

Si la papada es voluminosa se puede recurrir a la cirugía (se elimina la almohadilla de grasa que compone la papada mediante una pequeña incisión) o a la laserlipólisis, que consiste en disolver la grasa introduciendo una fibra óptica flexible que conduce la emisión del láser y produce un efecto fototérmico; es decir, que calienta las células grasas para destruirlas pero sin producir lesión alguna en los tejidos adyacentes.

Una vez que se ha disuelto la grasa, se puede extraer de tres formas:

  • Por aspiración mediante una jeringuilla
  • Mediante un masaje en la zona tratada succionando la grasa a través de la pequeña incisión realizada para la intervención,
  • Dejando que sea absorbida por los macrófagos presentes en el tejido normal.

¿Qué beneficios tiene esta técnica?

Con la liposucción tradicional la zona intervenida tiende a quedar flácida una vez que se aspira la grasa; sin embargo, con la laserlipólisis esto no ocurre, ya que el efecto fototérmico, además de disolver la grasa, estimula las proteínas creando nuevo colágeno en la zona que hace que ésta mejore su elasticidad y se adapte finalmente al contorno facial.

En cuanto al procedimiento para reducir papada, se realiza de manera ambulatoria con anestesia local, que es menos invasivo y supone menos sangrado e inflamación, pues la técnica utilizada cauteriza los vasos sanguíneos de la zona tratada, haciendo que el postoperatorio y la recuperación sean más rápidos.