¿El Método Apollo requiere revisiones?

El Método Apollo, también conocido como gastroplastia vertical  en manga por vía endoscópica (oral), es uno de los métodos no quirúrgico más novedosos y eficaces para tratar a las personas con obesidad cuyo índice de masa corporal (IMC) se sitúa entre 30 y 40 (entre 15 y 35 kilos de pérdida necesaria).

En la gastroplastia con el Método Apollo se realizan una serie de suturas a lo largo de toda la curvatura mayor del estómago con el fin de reducir su capacidad y dejar solo un 30-35% de su tamaño previo. De esta manera, el repositorio al que va a parar la comida es mucho más pequeño y se necesitan ingerir menos alimentos para alcanzar el punto de saciedad.

Se trata de una intervención que se realiza en quirófano (a pesar de que es por vía endoscópica) para tener la máxima seguridad y el procedimento se realiza en aproximadamente 60 – 90 minutos, y es posible volver a casa en menos de 24 horas tras la intervención. Como en todos los tratamientos de la obesidad, después del Método Apollo es fundamental seguir las normas nutricionales que se indican desde el equipo de Salud y Nutrición, además de iniciar y un plan de ejercicio físico con el fin de conseguir la mayor pérdida de peso posible.

Uno de los aspectos más importantes del proceso para adelgazar con el Método Apollo son las revisiones a través de las cuales los distintos especialistas implicados se aseguran de que estamos alcanzando los objetivos de pérdida de peso y consolidando los nuevos hábitos alimenticios y de actividad física que nos permitirán mantener esos buenos resultados en el tiempo. Este seguimiento multidisciplinar se realiza durante los dos años siguientes a la intervención.

Método apollo reducción estómago

¿Qué significa un seguimiento multidisciplinar?

El seguimiento multidisciplinar consiste en el acompañamiento que recibimos de los especialistas médicos, nutricionistas, psicólogos y expertos en actividad física desde la realización de la gastroplastia con Método Apollo hasta al menos los dos años siguientes a la intervención. Para ello, se establece un plan de revisiones en las que se realizarán los siguientes tipos de seguimiento:

  • Médico:pretende comprobar nuestro estado de salud general, si estamos consiguiendo la pérdida de peso prevista y si es necesario resolver cualquier molestia o problema que pueda surgir como consecuencia de la gastroplastia con Método Apollo.
  • Nutricional: el especialista en nutrición diseñará una dieta proteinada personalizada cuyo objetivo es no solo promover la pérdida de peso sino también crear unos nuevos hábitos alimenticios que se consoliden con el paso del tiempo y nos ayuden a mantener el peso indicado. El protocolo nutricional viene acompañado por una serie de objetivos de actividad física que harán que volvamos a ser una persona activa poco a poco.
  • Psicológico: durante el proceso de adelgazamiento a veces hay que lidiar con emociones negativas y estados de ansiedad que pueden hacer que no obtengamos los mejores resultados. Aquí el papel de los psicólogos es fundamental, ya que son quienes nos darán las herramientas necesarias para combatir estas emociones y encontrar cada día la motivación necesaria para alcanzar el éxito.

La frecuencia de las revisiones  dependerá de cada caso, pero lo habitual es que se inicien a los pocos días de la gastroplastia con Método Apollo y se vayan espaciando en el tiempo conforme avanza el tratamiento, pasando de ser semanales a mensuales y trimestrales. Aunque todo dependerá de la evolución de cada paciente.