Las cataratas en los ojos afectan sobre todo a las personas mayores, que desarrollan lo que se conoce como catarata senil, y tarde o temprano todos podemos sufrir este trastorno en mayor o menor grado. El ojo, al igual que otros órganos de nuestro cuerpo, envejece con el tiempo y las cataratas son una parte más de ese proceso natural de envejecimiento.

Origen de las cataratas en los ojos

Las cataratas en los ojos se producen cuando el cristalino se vuelve opaco y se nubla. El cristalino  es la lente natural del ojo, permite enfocar correctamente objetos tanto de lejos como de cerca y debe mantener su transparencia para que pase la luz y puedan percibirse las imágenes. La pérdida de visión suele ser lenta y progresiva, y no se detecta hasta que ya se aprecia una visión borrosa, que deslumbra o hay doble visión.

Las cataratas pueden aparecer en ambos ojos o solo en uno, y es más frecuente en las personas mayores.

Factores de riesgo

No obstante, hay factores de riesgo que pueden favorecer el desarrollo de cataratas en los ojos independientemente de la edad, como la diabetes, las grandes miopías, la exposición prolongada al sol y el calor, y las lesiones oculares debidas a un traumatismo.

Tratamiento de las cataratas en los ojos

El único tratamiento eficaz para las cataratas en los ojos es la cirugía. El oftalmólogo determinará el momento adecuado para intervenir, pero en general se suele esperar a que la catarata afecte realmente a la calidad de vida del paciente, es decir, cuando llegue un punto en el que la persona ya no pueda enfocar bien para enhebrar una aguja, leer o conducir.

Ese instante en el que ya no pueda realizar sus actividades diarias ni siquiera con ayuda de gafas es un buen momento para plantearse la cirugía. En la actualidad, esta intervención es rutinaria y muy sencilla, y consiste en extraer el cristalino que se ha vuelto opaco para sustituirlo por una lente artificial.

Prevención

Mantener una buena salud de nuestros ojos es fundamental, por lo que no hay que esperar a sentir alguna molestia para acudir al oftalmólogo. Lo recomendable es hacerse una revisión ocular al menos una vez al año, especialmente a partir de los 45, como método eficaz de detección precoz de anomalías o patologías oculares. Si en algún momento el diagnóstico de cataratas se confirma, será el oftalmólogo el que valore la situación y recomiende el tratamiento más apropiado.