¿Helados que de verdad no engordan?

¿A quién no le apetece un helado de vez en cuando? Son cremosos, refrescantes, agradables, apetitosos, de miles de sabores… pero tienes que tener en cuenta que los helados tienen grasa y azúcar, lo que hace que no sean inocuos si quieres perder peso o estás a dieta para adelgazar.

Helados de frutas

Una regla para saber si “engorda o no”

Te damos una regla sencilla que sirve para muchos alimentos, no solo para los helados: cuenta las calorías que tomas cuando caes en la tentación de comerte un helado. Un helado de dos bolas tiene más o menos 140 calorías, de las cuales 8 gr son de grasa y más de la mitad corresponden a grasas saturadas. A esto hay que añadir las calorías que provienen del azúcar y la ecuación es bien sencilla: los helados sí que engordan por su alto contenido calórico.

Helados con menos calorías

Eso sí, hay algunas versiones de helados que tienen menos calorías, con lo cual el aumento de peso es menor. Un ejemplo pueden ser los yogures congelados. Pero con estos helados también hay que tener cuidado y leer detenidamente la etiqueta cuando los compres, puesto que aunque estén hechos con leche descremada pueden tener un alto contenido en azúcar. Si los tomas fuera de casa, pide su composición y en función de ésta, decide si te los tomas o no.

Helados caseros

Pero no todo es negativo. Puedes intentar hacerte los helados en casa con productos naturales y sin añadir azúcares.

  • Helado de plátano casero: Puedes optar por hacerte un helado de plátano congelando primero la fruta y luego pasándola por una batidora. Harás un helado natural, sano, cremoso y sin azucares añadidos que te puede refrescar y agradar lo mismo que un helado convencional quitándote de encima una buena cantidad de calorías.
  • Los sorbetes: Otra buena opción a los helados son los sorbetes. Son bebidas refrescantes, agradables y muy saludables para hacer frente al calor y mantenernos hidratados sin sobresaltos a la hora de situarnos sobre báscula. Hay una gran variedad de sorbetes dependiendo de la fruta elegida, incluso se pueden combinar varias para cambiar de sabor. Eso sí, es fundamental no añadir ni azúcar ni edulcorantes, ya que el azúcar de la propia fruta es suficiente para dar un buen sabor al sorbete.

A la hora de reponer fuerzas y refrescarte también tienes las limonadas, que las puedes hacer con muchas de las frutas de temporada añadiendo un poco de hierbabuena para dar un toque especial.