Balón intragástrico para perder peso

La operación de balón gástrico o intragástrico (BIG) es un procedimiento que tiene como objetivo la reducción de la capacidad del estómago para poder ingerir menos alimentos y conseguir la sensación de saciedad antes de tiempo.

Este procedimiento está dirigido a personas obesas con un IMC entre 30 y 40 o que han realizado otros tratamientos y no han dado resultados. Como toda intervención, tiene una serie de ventajas y desventajas.

Ventajas del balón gástrico

Aunque la elección de la aplicación de una técnica u otra para adelgazar debe llevarse a cabo en función de la opinión de un experto, el balón intragástrico presenta una serie de ventajas y beneficios que lo han convertido en una de las mejores opciones para tratar la obesidad.

1. El balón gástrico es cómodo

Se trata de un método poco invasivo ya que se coloca dentro del estómago por vía endoscópica, donde permanecerá durante un plazo máximo de seis meses, y luego se procede a su retirada por la misma técnica.

El balón gástrico es un dispositivo que apenas produce rechazos: el material del que está hecho es silicona médica, un material muy flexible y con alta tolerancia. El balón gástrico plus, que permanece 12 meses en el estómago es igual que el que dura 6 meses pero tiene una mayor resistencia.

2. La colocación del balón intragástrico es rápida

La colocación del balón intragástrico es un proceso sencillo que dura aproximadamente 20-30 minutos y no requiere hospitalización.

Colocación balón gástrico

3. El balón intragástrico no necesita cirugía

Al tratarse de una técnica endoscópica que no precisa cirugía, por lo que no se producen cicatrices que afecten al aspecto físico del paciente.

4. Ayuda a adelgazar

El fundamento para la perder peso con esta técnica es simple, se basa en aumentar la sensación de saciedad del paciente con una cantidad de comida menor, al estar una parte del estómago ocupada por el balón.

La pérdida de peso y el logro del objetivo mejora la autoestima del paciente.

5. Es una técnica que no implica complicaciones graves

El balón intragástrico es una técnica segura que no suele llevar asociadas complicaciones graves. Las molestias más habituales que aparecen los primeros días tras la colocación del balón intragástrico son las náuseas o vómitos, debido a que el propio estómago, al identificar un cuerpo extraño, trata de expulsarlo. Los síntomas suelen aparecer durante varios días y desaparecen de forma espontánea.

6. El balón gástrico es eficaz

La eficacia del balón intragástrico está totalmente demostrada por los especialistas. En pacientes con obesidad importante, la pérdida de peso ronda 1 kg a la semana, aunque para ello es necesario que el paciente acompañe el tratamiento con cambios en los hábitos dietéticos.

7. Destinado a personas a partir de obesidad grado I

Está dirigido a un amplio grupo de personas que padecen obesidad (IMC>30). Los pacientes que más se benefician de este tratamiento son los que tienen un gran sobrepeso (peso > 40% o > 20-25 kg respecto a su peso ideal y que  deseen perder entre 15 y 30 kilos aproximadamente.

8. El balón intragástrico es un tratamiento multidisciplinar

El seguimiento de este tratamiento es cómodo y sencillo para el paciente. Implica la atención de un equipo de endocrinólogos/nutricionistas que valoren los hábitos nutricionales y propicien una reeducación en las pautas alimentarias del paciente, de esta forma se evita la recuperación del peso perdido durante los 6 meses que dura la implantación del balón.

Estos especialistas, además de controlar el balón, ayudarán al paciente a adaptarse a los nuevos hábitos saludables y alcanzar el objetivo.

Desventajas o contras del balón gástrico

  • El paciente deberá pasar un control previo para verificar que no tiene problemas gástricos y puede ser un candidato idóneo.
  • Los días posteriores a la intervención, el paciente puede tener nauseas, vómitos o malestar general. Es una sensación que desaparece enseguida.
  • Durante el tiempo que dura el tratamiento el paciente deberá adquirir unos hábitos alimentarios saludables para poder tener una pérdida de peso mantenida en el tiempo.
  • Este tratamiento está recomendado para perder entre 15 y 30 kilos. Los pacientes que necesiten una pérdida mayor deberán someterse a otros tratamientos o bien complementar el balón gástrico con otras técnicas.
  • Para realizar una retirada del balón correcta, el paciente debe prepararse siguiendo estrictamente los consejos del médico. Una preparación inadecuada puede provocar la suspensión del procedimiento y reprogramación de la intervención en otro momento.
  • Una vez retirado el balón, existe la sensación de vacío en el estómago. En estos momentos el paciente debe tener cuidado de no comer en exceso y poder seguir adelgazando o bien mantener el peso alcanzado.
  • Aunque las complicaciones durante el tratamiento son muy raras, el balón gástrico puede producir irritación de la mucosa gástrica, úlcera o perforación gástrica. Y en muy pocas ocasiones un rechazo por parte del organismo.