Todos sabemos que comer verduras es imprescindible ya que tienen un alto contenido en vitaminas, fibras y antioxidantes, lo que les hacen ser unos alimentos que no deben faltar en ninguna dieta. Así lo recomiendan las autoridades sanitarias, los profesionales de la salud y las campañas para la prevención de las enfermedades.

Desde pequeños, comer verduras no forma parte de las elecciones culinarias de las personas y fundamentalmente esto se debe a su sabor.

¿Comer verduras desde que somos pequeños?

Aunque el sabor varía en función de los tipos de verduras, es verdad que hay que ir acostumbrándose, porque no es lo que percibimos cuando estamos en el vientre de nuestra madre. De ahí que sean de los primeros alimentos sólidos que se introducen en la nutrición de los bebés, tras la lactancia materna o cuando todavía se sigue con ella.

Verduras

Las comer verduras de forma diaria es importante, debemos rescatar esa rutina que iniciamos en nuestros primeros meses de vida para convertirlas en alimentos imprescindibles en nuestro día a día.

Beneficios de comer verduras

Tenemos la ventaja de contar con una amplia variedad de verduras que son distintas a lo largo del año. Son las llamadas verduras de temporada. Existen innumerables formas de comerlas y añadirlas a nuestra dieta, solo tenemos que buscar las que más nos gustan y las que más fácil nos resulta comer.

A la hora de incorporar las verduras a la alimentación diaria, es importante tener presente sus beneficios:

Tránsito intestinal

Son buenas para mantener el tránsito intestinal, lo que te ayuda a evitar gases y a mantener una regularidad en las deposiciones.

Tu piel se mantendrá mejor

Comer verduras nos aportan una serie de vitaminas y nutrientes cuyos beneficios se pueden ver por dentro y por fuera.

Ayudan a reducir el estrés

Ten en cuenta que el magnesio y la vitamina C son dos nutrientes que se pierden con rapidez en situaciones de estrés.

Las verduras tienen una alto contenido de estos elementos, lo que te ayudará a manejar mejor esas situaciones. A esto hay que añadir que la vitamina B ayudar a hacer frente a la ansiedad.

Huesos serán más fuertes

Comer verduras ayudan a tener los huesos más fuertes, y así podrás moverte mejor y evitar lesiones que te hagan perder movilidad.