La punción folicular  forma parte del proceso de donación de óvulos que se trata de un procedimiento cuyas normas están legisladas, en el que se comprueba que la donante esté sana, tanto física como mentalmente, tenga una edad comprendida entre los 18 y 35 años y buena función del aparato reproductor. Además, la ley establece un límite de seis hijos nacidos vivos por donante.

¿Cuánto dura la punción folicular?

La punción folicular dura unos 20 minutos y se realiza con anestesia general. Se lleva a cabo por vía transvaginal y está guiada ecográficamente en todo momento.

¿Cómo es el proceso de la punción folicular?

Durante el procedimiento, se recoge el líquido folicular mediante aspiración con una aguja, y el material obtenido se pasa directamente a unos tubos que se llevan al laboratorio para su conservación a una temperatura de unos 37 grados y con unas condiciones de humedad adecuadas.

Conservación de los óvulos

Los óvulos permanecen almacenados en el laboratorio hasta que se puedan emplear en el tratamiento de reproducción asistida. En este sentido, normalmente se sincroniza la menstruación de la donante y de la receptora, para que el proceso de implantación sea lo más natural posible.

Después de la punción folicular

Durante los días posteriores a la punción folicular pueden aparecer algunas molestias y sangrado vaginal. Ante cualquier síntoma, es necesario que la donante de óvulos se ponga en contacto con el centro donde se ha llevado a cabo la extracción para comprobar que todo está bien.

¿Se puede volver a repetir?

Este procedimiento no se puede repetir hasta que hayan pasado entre cuatro y cinco meses.

El número de óvulos que se pueden obtener en cada punción varía en función de cada mujer, y de la respuesta que haya presentado a la estimulación ovárica previa