¿Por qué son tan importantes los análisis ETS? En los últimos años se ha producido un repunte de las enfermedades de transmisión sexual (ETS) por una relajación de los hábitos a la hora de protegerse cuando se mantienen relaciones sexuales.

Un porcentaje significativo de las infecciones se producen en población joven que no utiliza el preservativo en relaciones ocasionales.

Enfermedades ETS

Tipos de análisis ETS

Conocer la existencia por medio de análisis ETS de esos patógenos es clave para poder tratarlos cuanto antes y tomar medidas profilácticas a la hora de mantener relaciones con otras parejas, evitando así su propagación.

La forma de determinar la existencia de una ETS es a través de un examen físico y pruebas de laboratorio (analítica y citología).

Se recomienda hacer análisis ETS para detectar una enfermedad de transmisión sexual a las personas con un comportamiento sexual activo y de riesgo.

De hecho, las autoridades sanitarias de Estados Unidos recomiendan un examen anual en mujeres en grupos de riesgo, ya que muchas de estas infecciones pueden producir graves complicaciones en las que se puede ver comprometida su fertilidad.

Exploración

Las mujeres con conductas sexuales de alto riesgo deben someterse a un examen pélvico y genital completo que se complementará con las pruebas analíticas que determinen la presencia de gonorrea, sífilis, VPH, VIH y clamidia.

Algunas de estas infecciones, como la sífilis, puede tener nefastas consecuencias si la mujer está embarazada.

Por eso, en determinados grupos poblacionales se aconseja llevar a cabo la determinación de cualquier patógeno causante de una ETS en el primer trimestre del embarazo.

Test de enfermedades de transmisión sexual

En el caso de la sífilis, también se recomienda determinar su presencia en el caso de hombres que mantienen relaciones con otros hombres y que tienen un comportamiento sexual de riesgo.

Porque no solo es el VIH el que se transmite por vía sexual, hay una serie de virus y bacterias que se propagan por esta vía y que tienen graves consecuencias, como es el caso de VPH (Virus del papiloma humano), que es el responsable del cáncer de cuello de útero y de cáncer de ano en hombres que mantienen relaciones con otros hombres.