Natación en aguas abiertas

¿Harto de nadar entre los bordillos y las corcheras de la piscina? ¿Te apetece ponerte a prueba en aguas abiertas? ¿Te atreves con una travesía a nado?

Nadar en aguas abiertas acompañados de las olas del mar o cruzar un río o un pantano a nado son retos que cada vez cuentan con más adeptos. El verano es un buen reclamo para salir de tu zona de confort y probar la libertad de sentirte rodeado de agua, ya sea para una travesía o como parte de un triatlón o un Ironman. Pero sin perder de vista que se trata de una disciplina más exigente y no exenta de riesgos.

Cómo nadar en aguas abiertas: 8 consejos para nadar en aguas abiertas

Trabaja la resistencia

No es lo mismo nadar 25 ó 50 metros que avanzar varias millas sin ningún punto de apoyo. Como en otros deportes de fondo, hay que acostumbrarse a pasar muchos minutos u horas nadando. Incluso estar preparados para nadar más de lo previsto. Sin ir más lejos, en la Travesía del Estrecho la distancia entre la Isla de Tarifa y las proximidades de Punta Cires (Marruecos) puede variar de 18,5 a 22 kilómetros, según donde te arrastren las corrientes. Para hacernos una idea de lo que pueden ser varias horas dando brazadas se aconseja el entrenamiento aeróbico de natación para principiantes ligero por el Método Continuo: entre 30 minutos a 2 horas o más, a un 60-70% del VO2max y una frecuencia cardíaca entre 130 y 150 ppm. Y antes de cualquier prueba, haber realizado un entrenamiento específico de, al menos, 5 ó 6 meses.  

Mejora la fuerza

En piscina podemos pasarnos horas nadando a un ritmo constante y sin sobresaltos. La naturaleza es imprevisible. Puede que tengamos que acelerar para llegar antes a la costa ante el avance de una tormenta, nadar con bravura a contracorriente o dar brazadas para sacar ventaja a otros competidores al inicio de un triatlón. Como en otros deportes de fondo, la rutina de gimnasio es imprescindible para ganar potencia y/o velocidad. Introduce trabajo anaeróbico para los trenes superior e inferior en tierra firma (pesas, máquinas…) y altérnalo con sprints nado a máxima velocidad (cross swim). En seis semanas la potencia aumentará hasta un 11,70% (1), ya ves que nadar tiene muchos beneficios.

Fortalece tu mente

En los caóticos minutos del inicio de un triatlón donde todo son manotazos y patadas es fácil perder los estribos. A mitad de travesía el problema puede ser el cansancio, las dudas sobre si seremos capaces. Un buen entreno en los meses previos y conocer bien nuestras capacidades y limitaciones nos ayudará a abordar los retos con garantías hasta el final.

Potencia la serenidad

En la piscina todas las condiciones están controladas milimétricamente. La naturaleza puede cambiar sin aviso previo. Deberás estar preparado para que las condiciones del agua empeoren antes de abandonar la orilla: corrientes más fuertes de lo previsto, vientos que provocan olas (y que pueden llegar a causar mareos) o una niebla imprevista que genere una situación de auténtica inseguridad (no permite al nadador orientarse ni a su equipo de apoyo tenerle a la vista). En medio del mar el pánico es el peor enemigo del nadador.

Ante todo, se debe mantener la calma, evaluar la situación y, llegado el caso, avisar al equipo de apoyo de que abandonamos.

Consulta a expertos

Es imprescindible consultar la meteorología, el estado de la mar y hasta el tráfico marítimo de la zona. En el caso de los lagos, se debe conocer si hay corrientes subacuáticas. Si nadas solo, no invadas el área reservada a motos de agua o embarcaciones. En travesías, atiende a las indicaciones de la organización y autoridades, para no crear situaciones de riesgo con grandes embarcaciones. En caso de que ambas orillas pertenezcan a países distintos, no salgas sin tener resuelto el papeleo fronterizo. De lo contrario podrías acabar detenido.  

No olvides comer y beber

Aprovecha la boya para cargar geles o fruta. Y agua. Aunque no lo parezca, dentro del agua puedes deshidratarte.

Acostúmbrate al frío

Por mucho calor que haga en tierra firme, mar adentro el agua estará sensiblemente más fría. Más aún, si hay corrientes. La natación en aguas abiertas más de 6 horas a una temperatura de 15-16ºC puede provocar hipotermia (2). Es una de las razones por las que en 2017 la Unión Internacional de Triatlon estipuló que la temperatura mínima del agua para desarrollarse una prueba con neoprenos debía ser de 12ºC; 16ºC, en caso de permitir el baño sin esa prenda (3).

Hazte con la equipación de natación en aguas abiertas

  • Traje para nadar en el mar de neopreno. Favorece la flotabilidad, te protege de las medusas y mejora la velocidad (4)
  • Boya de seguridadEs un pequeño hinchable naranja que se ata a la cintura del nadador. Ejerce como flotador en momentos de agotamiento, proporciona visibilidad y garantiza estanqueidad (para llevar avituallamiento, llaves, móvil).
  • Gorro. La cabeza es la única parte del nadador que siempre permanece a flote. Busca un gorro en tonos vistosos para facilitar tu localización en caso de emergencia.
  • Gafas. Las polarizadas o de espejo evitan quedarse deslumbrado por el sol.
  • Vaselina y lanolina. Reducen la fricción y ayudan a mantener la temperatura corporal.

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